El plan que han elaborado Washington y Moscú para terminar la guerra ha sido recibido en Ucrania como una humillación. El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, ha advertido este viernes en un mensaje a la nación de que el país se encuentra “en uno de los momentos más difíciles de su historia”: “Nos podríamos encontrar ante una muy difícil decisión, o perder nuestra dignidad o perder a un aliado clave [Estados Unidos]. O 28 puntos difíciles o un invierno extremadamente complicado”.
